Sunday, August 24, 2008

Verano 2008 Fiesta de mis Padres

Este año nos hemos tomado vacaciones en serio: tres semanas y media, y nos ha dado tiempo para hacer muchas cosas. Empezamos el verano en Santander con la fiesta sorpresa para mis padres celebrando sus 40 años de casados. En la fiesta me sentí como en mi boda: muy feliz y la celebración me pareció demasiado corta. Me hubiera gustado hablar con cada invitado por lo menos dos horas seguidas, pero no se puede. Entre otras cosas porque no hay tiempo, y además ese dia Laura estaba muy cansada y nos tuvimos que ir a casa temprano. Mi conclusión es que hay que repetir. Tal vez deberíamos celebrar el casamiento de los padres todos los años. La idea de que fuera una fiesta sorpresa me vino porque Maria, la hermana de Xavi, organizó una fiesta sorpresa para el cumpleaños de sus papas, Climent y Enriqueta, el año pasado, y fue un éxito total. No solo es bonita la fiesta, sino también el organizar la fiesta. Todas las fotos que los amigos de mis papas me mandaron me evocaban memorias muy gratas de la infancia. Muchas gracias a todos los que vinieron y a todos los que participaron de una forma u otra. La sorpresa nos salio redonda porque vino mucha gente, Conchita y Amalia dieron unos discursos espectaculares, y además dio la casualidad de que el 14 de junio era el cumpleaños de Carlos, así que con la excusa de celebrar el cumpleaños de Carlos, que al final también lo celebramos, Carlos trajo a mis padres al Hotel Real sin que mis padres sospecharan nada. Claro está que cuando nos vieron a todos en el Hotel Real reunidos todo empezo a tener sentido. Mi mamá decía, "que raro que fuerais todos tan guapos a la casa de Mario y Marisol," mi papá decía, "que raro que esta mañana me llamara Alfredo desde Miami para felicitarme el aniversario de boda, porque nuestro aniversario es en abril ..." Lo más dificil para mi fue guardar el secreto ... pero mereció la pena. Aquí os dejo con algunas fotos de la fiesta, en las cuales podéis ver la cara de sorpresa de mis padres. Y lo dicho ¡hay que repetir!